Los pasaportes biométricos y los documentos de viaje se integran con identificadores que establecen un vínculo entre el titular auténtico y el documento. Estos identificadores consisten en una imagen facial y huellas dactilares. La integración de la biometría en los pasaportes y documentos de viaje supuestamente contribuye a mejorar la seguridad de los documentos y a evitar la falsificación de documentos.